Una breve introducción...



   El Centro Histórico es la parte más antigua de la Ciudad de México y también es la que contiene algunos de los tesoros culturales más apreciados del país. El Centro, como lo llaman los habitantes de la ciudad, es una zona de calles que nos invitan a viajar al pasado y recordar sus tiempos de esplendor, tiempos en que las carrozas tiradas por caballos llevaban en su interior a virreyes y altos funcionarios, mientras comerciantes, frailes, religiosas, artesanos y otros personajes se abrían paso entre las famosas y bellas calles de la "Ciudad de los Palacios".

En el Centro Histórico de la Ciudad de México se encuentran verdaderas joyas de la arquitectura como el Templo Mayor, la casa de Hernán Cortés, el Palacio de Axayácatl, el Parián, el Ayuntamiento, el Palacio Virreinal, la Plaza del Volador, el Palacio de la Santa Inquisición, la Plaza de Armas, la Acequia Real, la Catedral Metropolitana, entre muchos otros lugares que son y han sido importantes en la historia de esta ciudad. 

Con el paso de los años muchos de los lugares que se mencionaron anteriormente han cambiado de nombre e incluso han sufrido remodelaciones en su arquitectura original para poder seguir preservando la esencia de cada uno de estos recintos. En este blog describiremos muchos de estos lugares, relataremos su historia y mostraremos algunas imágenes de como lucian en el pasado y como se han preservado hasta nuestros dias.

El Centro Histórico de la Ciudad de México, es un lugar tan maravilloso, que no podríamos terminar de enumerar sus grandes atractivos y leyendas, mismas que han pasado a formar parte del legado nacional, lo que ha llevado a la UNESCO a declararlo como "Patrimonio Cultural de la Humanidad". Durante los últimos años se ha emprendido una intensa campaña de restauración, para devolverle a la zona el esplendor y el dinamismo que la caracterizaba en otras épocas.